Izquierda Republicana de Cataluña
1. Quienes somos
Esquerra Republicana es un partido político catalán que se define de izquierda socialdemócrata, favorable a la independencia de los Països Catalans. El partido tiene presencia en todos los Països Catalans: Catalunya, València y las Illes Balears y Pitiüses. Actualmente los máximos dirigentes del partido son Oriol Junqueras, presidente, y Marta Rovira, secretaria general. Las Juventudes de Esquerra Republicana de Cataluny a (JERC) se ocupan de los temas que afectan a la población juvenil.
Actualmente es la segunda fuerza política en el Parlamento de Catalunya, con 496.292 votos y 21 diputados obtenidos en las elecciones celebradas el 25 de noviembre de 2012. Esquerra Republicana también cuenta con 3 representantes en el Congreso de los Diputados del Estado español, una represente en el Senado, 145 acaldes, y 1.397 concejales en los ayuntamientos.
2. Organización de Esquerra Republicana
Presidente de Esquerra Republicana: Oriol Junqueras
Secretaria General: Marta Rovira
Congreso Nacional: órgano soberano del partido, toda la militancia forma parte de él. Se celebra cada cuatro años y fija la línea política. Escoge la Presidencia, la Secretaría General, las vice–secretarías generales y las secretarías nacionales.
Consejo Nacional: máximo órgano decisorio entre congresos, ajusta la política del partido de acuerdo a la línea fijada por el Congreso Nacional anterior.
Conferencia Nacional: actualiza la estrategia política aprobada en el último Congreso Nacional o la última Conferencia Nacional.
Ejecutiva Nacional: dirección y administración diaria del partido, se reúne quincenalmente.
Permanente Nacional: toma decisiones de urgencia cuando otros órganos no pueden reunirse.
En el ámbito territorial, Esquerra Republicana se organiza mediante una estructura articulada a través de secciones locales, federaciones comarcales y federaciones regionales. Las federaciones territoriales son los órganos de decisión en el País Valencià, las Illes Balears y Pitiüses y en la Catalunya Nord. Todos los militantes forman parte de estos órganos.
A nivel sectorial se dispone de secretarías nacionales de ámbitos específicos, que tienen el apoyo de comisiones sectoriales.
3. Cómo nos financiamos
En Esquerra Republicana obtenemos nuestros ingresos para desarrollar nuestra labor política mediante:
Las subvenciones públicas en función de los resultados electorales y la representación en las cámaras legislativas y los ayuntamientos.
Las cuotas de la militancia.
Las aportaciones de los cargos públicos.
Las cuentas del partido son controlados y auditados anualmente por la Sindicatura de Cuentas de Catalunya y el Tribunal de Cuentas del Estado español.
4. Principales postulados ideológicos
Esquerra Republicana propugna la construcción de un estado independiente para la nación catalana en el marco europeo y la consecución de una sociedad más justa y solidaria, sin desigualdades entre las personas y los territorios.
Esquerra Republicana se define como un partido republicano, democrático y de izquierda no dogmática que tiene como referencia la defensa del pluralismo, la defensa de los derechos humanos y de los pueblos y del medio ambiente. ERC es el partido principal de la izquierda nacional y nunca ha dependido de fuerzas políticas ajenas a la nación catalana.
4.1 Izquierda
Desde el punto de vista económico y social, Esquerra Republicana fundamenta su ideología y la acción política en la defensa de los intereses de los sectores productivos y de las clases populares. Los trabajadores y trabajadoras, profesionales liberales, autónomos, las pequeñas y medianas empresas, los campesinos, el sector pesquero… son el fundamento de la economía productiva, básica en el desarrollo de un país.
Esquerra Republicana vela por la economía productiva, respetando los frutos individuales y colectivos del trabajo. Por lo contrario, la economía especulativa y financiera debe ser controlada por el estado para que esté al servicio de la economía productiva.
En la dura situación de crisis actual, debe mantenerse el estado del bienestar y defenderse los avances sociales conseguidos en el siglo XX. El estado del bienestar no puede limitarse al asistencialismo y a gestionar el capitalismo, sino que debe contribuir a la distribución de la riqueza. El sector público tiene que asumir los servicios públicos esenciales para compensar las desigualdades sociales y garantizar el funcionamiento de la economía al servicio de la mayoría de la población.
ERC defiende también un cambio en el modelo productivo y de consumo que respete los límites ecológicos del planeta y sea aceptable para todas las comunidades que habitan en él. La eficiencia en el uso de la energía y los recursos naturales, la reducción de los residuos generados o la preservación de la biodiversidad conforman los objetivos políticos básicos en el ámbito del desarrollo sostenible.
4.2 República
Esquerra Republicana defiende la forma de estado republicana porque es la mejor garantía para el ejercicio de la democracia y la legitimación del poder. La calidad democrática y la democracia participativa forman parte intrínseca de los valores republicanos.
Esquerra Republicana entiende la democracia como el compromiso permanente de profundizar la participación ciudadana en la toma de decisiones colectivas. Por eso es necesario transformar la actual democracia representativa en una democracia que cuente también con mecanismos de participación directa. El ejercicio democrático desde el nivel local es inherente a estos objetivos.
A pesar del reconocimiento teórico de los derechos individuales, amplios sectores de la sociedad los ven conculcados por razón de sexo, orientación sexual, edad, discapacidad, enfermedad, lengua, cultura, etnia, opinión, religión, nacionalidad u otros motivos. Debe profundizarse, pues, en la defensa de los derechos de todas las personas y luchar contra cualquier tipo de discriminación. Sólo desde la igualdad de oportunidades de todas las personas y la no discriminación se puede construir una democracia real.
4.3 Independencia
Esquerra Republicana propugna la creación de un estado independiente para la nación catalana en el marco europeo y a través del ejercicio pacífico y democrático del derecho de autodeterminación.
La consecución de un estado es una herramienta necesaria para conseguir el máximo nivel de bienestar económico y justicia social para la mayoría de ciudadanos. En este sentido, el desequilibrio fiscal existente entre la nación catalana y el Estado español y la imposibilidad de disponer de los recursos generados por los ciudadanos de los Països Catalans, impiden alcanzar estos objetivos.
La nación catalana la constituyen diferentes sujetos políticos. Su naturaleza histórica y social, con instituciones propias y diferentes estadios de consciencia les confiere diferentes ritmos. De la misma manera que Esquerra Republicana propugna el derecho a decidir del pueblo de Catalunya para constituir una República independiente, también propugna la aplicación del derecho a decidir de la Catalunya Nord y de cada una de las illes Balears respecto a su adhesión a la futura Republica de Catalunya. Esquerra Republicana defiende también la creación de un estado del País Valencia que se acabe federando con el resto de territorios con el objetivo de crear una república de tipo federal (Catalunya del Norte, en Francia, País Valencià y Mallorca, Menorca, Eivissa i Formentera).
Fiel a la tradición republicana, Esquerra Republicana concibe la nación como un espacio cívica que basa su vínculo en la voluntad de ser y en un proyecto de futuro compartido. Así por ejemplo, para el caso de Catalunya, se considera catalán toda persona que vive en Catalunya y que quiere ser catalana, con independencia de su lugar de nacimiento, lengua hablada, origen familiar, grupo étnico o religión.
5. Nuestra historia
5.1 Los inicios y la República
Esquerra Republicana es un partido de izquierdas que defiende la independencia de la nación catalana y la justicia social. Fundado en 1931, a lo largo de sus más de 80 años de historia ha vivido momentos muy diversos en paralelo a la historia reciente de Catalunya y del conjunto de los Països Catalans (Catalunya, Catalunya Nord, País Valencià, Illes Balears y Franja de Ponent).
Los orígenes de Esquerra Republicana se encuentran en los movimientos republicano y federal de finales del siglo XIX y principios del siglo XX. Las transformaciones de la sociedad catalana durante el siglo XIX, fruto de la revolución industrial, provocaron la aparición de los primeros movimientos sociales progresistas y federalistas, de base democrática y republicana. A su vez, el movimiento cultural y literario La Renaixença (el renacimiento), a principios del siglo XIX, inició el desarrollo de una conciencia nacional, siguiendo de cerca el romanticismo europeo. A nivel político, el Congreso de los republicanos federales, en 1883, y la redacción de las Bases de Manresa, en 1892, supusieron los dos primeros movimientos políticos catalanes con propósitos claramente nacionales.
En Marzo de 1931, en el contexto del final de la dictadura de Primo de Rivera, nació Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) como confluencia de sectores nacionalistas y de izquierdas que pretendían construir un frente común ante un Estado español contrario a los intereses de las clases populares catalanas y anquilosado en el pasado. El nuevo partido, presidido por Francesc Macià, resultó de la unión de Estat Català (Estado Catalán), el Partit Republicà Català (Partido Republicano Catalán) y el grupo L’Opinió (la Opinión). ERC tuvo un papel central en el advenimiento de la República en Catalunya y España.
Los elementos más importantes del ideario del nuevo partido fueron el reconocimiento de Catalunya como nación, la defensa de los derechos individuales del hombre y la redistribución de la riqueza, mientras que el programa social defendía la plena libertad sindical, el derecho a huelga, el salario mínimo, la jornada de ocho horas, las vacaciones obligatorias, seguros, jubilaciones y escuelas de trabajo.
En las elecciones municipales de Abril de 1931, ERC obtuvo la victoria en Catalunya y Francesc Macià proclamó la República Catalana. En el conjunto del Estado español, ganaron las fuerzas republicanas, con quien Macià negoció el nuevo autogobierno de Catalunya. Macià aceptó recuperar la Generalitat de Catalunya, nombre de la institución de gobierno catalana suprimida en 1714, y se aprobó el Estatuto de Autonomía de Catalunya, que recogía algunos de los poderes de autogobierno perdidos por Catalunya en la Guerra de Sucesión (1705-1714).
Durante los años de la República (1931-1939), ERC fue el partido hegemónico en Catalunya y ganó todas las elecciones que se celebraron. En 1933, falleció Francesc Macià y le sucedió Lluís Companys como presidente de la Generalitat de Catalunya. Companys proclamó el Estado catalán en 1934, en un contexto de involución de la derecha española y de riesgo de golpe de estado militar. Por este hecho fue encarcelado y la Generalitat abolida, hasta que la victoria del Frente de Izquierdas en 1936 le sacó de la prisión.
5.2 La guerra civil y la dictadura
Aunque en Catalunya no triunfó, la insurrección de los militares españoles contra el orden democrático de la II República propició el inicio de la Guerra Civil española (1936-1939). Durante estos años, Lluís Companys fue el presidente de la Generalitat y ERC tuvo un papel clave en el gobierno catalán, conjuntamente con otras fuerzas políticas y sociales.
La victoria de las tropas del general Franco puso fin a la guerra e inició una dictadura sangrienta inspirada en el fascismo. El President Companys fue detenido por la Gestapo en Francia y entregado al gobierno español, que lo fusiló en Montjuïc en Octubre de 1940 en un hecho sin precedentes. Es el único presidente de gobierno del mundo escogido democráticamente que ha muerto ejecutado.
Esquerra Republicana sufrió la represión de la dictadura franquista (1939–1975) como el conjunto de la sociedad catalana y española. La mitad de los 70.000 militantes de ERC se exiliaron y una cuarta parte fueron encarcelados, ejecutados o murieron en la guerra. En estas circunstancias, ERC nombró una dirección en el exilio y mantuvo una actividad clandestina en todas las acciones unitarias de la oposición antifranquista contra la dictadura.
De forma más minoritaria, en los años setenta surgieron las primeras formulaciones del independentismo moderno, de raíz marxista e inspirado en los movimientos de liberación nacional de tipo colonial. Estas tendencias acabarán dando forma a numerosas organizaciones independentistas y de izquierdas que con distintos matices desembocarán a Esquerra Republicana a partir de los años noventa.
5.3 La transición y la autonomía
La dureza de la represión política y social y los cambios que experimentó la sociedad catalana a nivel demográfico, social y económico provocaron la práctica desaparición del partido. En 1977, en las primeras elecciones después de la dictadura, ERC no pudo participar de forma directa al no estar legalizada. En Catalunya y en el conjunto del Estado español aparecía un sistema de partidos nuevo y ERC tenía un papel muy reducido en comparación con la hegemonía de los años treinta. Las nuevas fuerzas políticas elaboraron y defendieron una Constitución española a la que ERC votó en contra porque no aceptaba los principios republicanos ni el derecho a la autodeterminación de los pueblos.
La llamada transición democrática española consistió en un pacto entre los restos del franquismo y la oposición democrática. No se condenó oficialmente el régimen franquista, a pesar de que se fundamentaba en un alzamiento contra el régimen democrático de la Segunda República, ni se reconocieron las víctimas de la represión de la dictadura. Ninguna persona ha sido juzgada por los crímenes del franquismo ni por la vulneración de los derechos humanos individuales y colectivos.
El ejemplo más flagrante lo representa el juicio al President Companys, que el Estado español se ha negado repetidamente a anular. El juicio de guerra sumarísimo que lo condenó al fusilamiento, además de no tener ningún tipo de garantía procesal, representaba una condena a la democracia y a todo el pueblo de Catalunya. A finales de 2013, ERC presentó una querella a la justicia argentina contra el Estado español acusándole de crímenes contra la humanidad, por el asesinato del presidente de la Generalitat republicana. Esta querella ha sido admitida a trámite y se suma a 200 querellas más por asesinatos del régimen franquista. El olvido de la memoria histórica representó uno de los rasgos fundamentales del pacto de la transición, a diferencia de los procesos de revisión histórica vividos en Alemania, Italia o Suráfrica.
Con el retorno del President Tarradellas del exilio, se restauró la Generalitat y se redactó un nuevo Estatuto de Autonomía de Catalunya. ERC se opuso al texto por considerarlo poco autonomista pero acabó defendiendo el sí en el referéndum. A las primeras elecciones al Parlament catalán después de la dictadura, ERC obtuvo 14 de los 135 diputados, aunque en elecciones sucesivas sufrió un descenso muy importante y perdió la representación en el Congreso de Diputados de Madrid. La fuerza de centro-derecha Convergència i Unió, que ha ganado todas las elecciones catalanas, lideró la creación y consolidación de las instituciones autonómicas, pactando con los distintos gobiernos de Madrid.
A partir de los años noventa, ERC reforzó su posicionamiento como partido independentista que propugna la creación de un estado independiente en el marco europeo. Agrupando varios sectores políticos del ámbito independentista, aumentó progresivamente su peso electoral y se consolidó como tercera fuerza por detrás de Convergència i Unió y del Partit dels Socialistes de Catalunya (PSC-PSOE). A nivel municipal consolidó también una amplia representación en número de concejales y alcaldes por toda Catalunya.
A partir de finales de los años noventa, progresivamente incorporó al discurso independentista un mayor discurso social que le permitió llegar a nuevos sectores sociales hasta aquel momento ajenos al partido. Este hecho condujo ERC a obtener 545.000 votos en 2003, con 23 diputados en el Parlament de Catalunya; el mejor resultado desde la República. A su vez, la posición decisiva del partido permitió la creación del primer gobierno catalanista y de izquierdas desde la República, juntamente con el Partit dels Socialistes de Catalunya (PSC–PSOE) e Iniciativa per Catalunya–Verds (ICV). También fue en 2003 cuando Esquerra Republicana del País Valencià (ERPV) se presenta a nivel local en el País Valencià y logra los primeros concejales en Sueca, Xixona y Barxeta.
En Catalunya, el llamado gobierno tripartito impulsó un amplio programa social que tuvo en la reforma del Estatuto de Autonomía de Catalunya y del sistema de financiación de la Generalitat su objetivo principal. ERC tuvo un papel decisivo en este gobierno y ocupó conselleries (ministerios) de responsabilidad (Consejería primera, Educación, Bienestar y Familia, Comercio, Gobernación y Universidades, entre otras).
Después de aprobarse el Estatuto en el parlamento catalán con un amplio consenso, el pacto entre CiU y el PSOE en Madrid supuso un importante recorte de su contenido en el trámite a las Cortes españolas. En el referéndum para su aprobación, ERC pidió el voto en contra, hecho que comportó su salida del gobierno catalán y la convocatoria de elecciones anticipadas.
A pesar de perder votos, Esquerra Republicana obtuvo un resultado importante en aquellas elecciones (416.000 votos y 21 diputados) y se repitió el pacto de progreso con PSC–PSOE e ICV–EUiA. En las siguientes elecciones, en 2010, el electorado castigó ERC con la pérdida de casi la mitad de los votos respecto a 2006 (219.000) y perdió once diputados. Estos resultados se repitieron en todo el ciclo electoral. CiU volvió al Govern de la Generalitat después de siete años de oposición.
Paralelamente en 2007, Esquerra Republicana participa coaligado en las elecciones autonómicas en las Illes Balears. En Mallorca se presenta con PSM, IU y Els Verds y en el caso de Eivissa lo hace con PSOE, IU i ENE. En estos comicios Esquerra Republicana consigue aparte de diversos representantes municipales, una diputada en el Parlament de les Illes Balears i un Conseller electo en en el Consell de Mallorca. Las fuerzas de progreso logran una mayoria que posibilita que diversos representantes de Esquerra Republicana entren en el gobierno autonómico, en el gobierno del Consell de Mallorca y en el gobierno de Palma. En diciembre de 2009, los cargos de Esquerra Republicana en la isla de Mallorca abandonan el gobierno después de que sus socios incumplieran el pacto de gobierno y el código ético aprobado por las fuerzas progresistas en el momento en que la corrupción afectó a uno de sus socios.
5.4 El proceso hacia la independencia
Con la entrada de Oriol Junqueras como Presidente de Esquerra Republicana, en 2011, se inició una etapa de unidad en la cual Esquerra Republicana trabaja conjuntamente con la sociedad civil para alcanzar el objetivo de la independencia de Catalunya. La enorme manifestación del 11 de Septiembre de 2012 en Barcelona, organizada por la Asamblea Nacional Catalana, provocó la convocatoria electoral del 25 de Noviembre e inició una etapa marcada por la entrada del derecho a decidir en la agenda política.
En aquellas elecciones, Esquerra Republicana obtuvo 496.000 votos y pasó a ser la segunda fuerza del Parlament, con 21 diputados. Estos resultados convirtieron Oriol Junqueras en jefe de la oposición y permitieron firmar un acuerdo con CiU para dar apoyo parlamentario al gobierno de Artur Mas. El objetivo principal de este acuerdo es convocar una consulta de autodeterminación en 2014 e introducir un cambio social en la política de austeridad económica de la Generalitat.